El sector agroalimentario constituye uno de los principales motores de la economía de la Comunitat Valenciana, en gran medida gracias a la agricultura de regadío que ocupa más del 50 % de las tierras de cultivo. Dentro de este sector, los cítricos representan el 47 % de la estructura de producción vegetal de la región, siendo el cultivo de mayor valor económico, social y cultural.
En las principales zonas citrícolas de la Comunitat, donde predomina el clima semiárido, las precipitaciones son escasas e irregulares, por lo que la disponibilidad de agua para el riego representa el principal factor limitante de la producción y rentabilidad del cultivo. Además, el aumento de las temperaturas y el descendo en las precipitaciones a causa del cambio climático están agravando esta situación, que conllevará inevitablemente a una reducción de la disponibilidad de agua para el riego, a una mayor sobreexplotación de los acuíferos, y con ello, a un deterioro de la calidad de las aguas, por lo que resulta indispensable la búsqueda de nuevas fuentes de agua para el riego.
En los últimos años, el agua marina desalinizada se postula como una fuente de agua importante para el riego, ya que es un recurso hídrico inagotable y no sujeto a variables climáticas, por lo que estratégicamente resulta idóneo para aumentar de forma sistemática la disponibilidad de recursos hídricos, especialmente en zonas deficitarias. Sin embargo, desde el punto de vista de su uso para el riego agrícola, el agua desalinizada pese a su baja salinidad presenta una serie de inconvenientes agronómicos asociados a desaquilibrios en la concentración de ciertos elementos esenciales, mientras que otros elementos como el boro todavía se mantiene en concentraciones elevadas, que puede producir graves daños por toxicidad en cultivos sensibles como los cítricos.
En este contexto nace el proyecto DESALICitrus, que aborda los posibles riesgos y problemas relacionados con el exceso de boro que puede generar el riego con agua marina desalinizada en el cultivo de cítricos, teniendo en cuenta las posibles implicaciones tanto a nivel suelo como de planta. La hipótesis general de este proyecto es que el desarrollo de un modelo predictivo de la dinámica del boro en el sistema suelo-agua-planta y el uso de técnicas agronómicas, como el empleo de portainjertos tolerantes al exceso de boro y/o estrategias de Riego Salino Controlado (RSC), puede mejorar la tolerancia de los cítricos regados con agua desalada bajo condiciones semiáridas.
Los objetivos del proyecto DESALICitrus son:
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